Comer una buena dosis diaria de frutas y verduras es requisito básico para tener una vida saludable, pues por sus propiedades nutricionales, estos alimentos de la tierra contribuyen a mejorar nuestra calidad de vida y por su bajo costo nuestra economía.
Sin embargo, no todo es color de rosa: debido a que es cada vez más común utilizar todo tipo de pesticidas para combatir las plagas que afectan a las cosechas, es absolutamente necesario cuidar la higiene de estos alimentos si queremos evitar afectaciones a nuestra salud.
Va en serio; estudios hechos por el Environmental Working Group (EWG) -organización dedicada a proteger la salud humana y el medio ambiente- revelan situaciones de consideración: más de 98% de muestras de fresas, duraznos y manzanas pueden contener al menos un residuo de pesticidas; una papa tradicional tiene más pesticidas en relación a su peso que cualquier otro producto de cosecha y una muestra de uva puede contener más de 15 agentes contaminantes.
La lista sigue, e incluye alimentos como el apio, las cerezas, espinacas, pimientos dulces, tomate cherry, pepinos y otras frutas y vegetales que se consumen diariamente en los hogares mexicanos.
Si bien el producto que llega a los mercados no tiene una dosis letal para un consumo, contiene lo suficiente para hacer daño a la salud si se consume en periodos prolongados; en este punto surge la pregunta “¿entonces no hay problema si consumo un producto con pesticida de vez en cuando?” Sí, sí hay problema: no porque sea un consumo reducido hay justificación para descuidarse, pues las consecuencias de esto involucran enfermedades diversas que pueden evitarse con los cuidados adecuados.
Por esto y más, asegúrate siempre de comprar productos de la mejor calidad, de empresas autorizadas y que tengan los más altos estándares en producción; además, es fundamental lavar con cuidado y desinfectar apropiadamente los productos frescos que lleves a tu hogar, de este modo estarás disminuyendo los riesgos que los pesticidas presentan para tu salud.