En un planeta tan diverso y lleno de vida como el nuestro, no es extraño conocer diariamente sobre sucesos naturales que funcionan de manera al parecer simple pero que son resultado de una serie de procesos complejos. Uno de ellos es sin duda la filtración del agua por medio de plantas, conocido como fitodepuración.
¿Qué es la fitodepuración?
La fitodepuración es una técnica de purificación que se caracteriza por el hecho de que diversas plantas que crecen en el agua se encargan de erradicar bacterias y microorganismos nocivos que abundan en este espacio y en consecuencia amenazan su integridad.
No sólo purifican formas de vida dañinas, también pueden limpiar líquidos contaminados con metales o con una cantidad excesiva de minerales, todo mientras oxigenan el agua.
Este proceso se lleva a cabo en sistemas de fitodepuración, también conocidos como humedales artificiales o depuradores, y en ellos se colocan diversos tipos de plantas efectivas para este fin.
Pueden colocarse en sistemas de flujo sumergido o superficial, lo cual dependerá del área en la que se encuentre el agua a depurar.
Por su carácter natural, así como su bajo costo de mantenimiento y su alto rendimiento, la fitodepuración es cada vez más utilizada en Estados Unidos y Europa, lugares en donde ha ganado popularidad en industrias como la agrícola como una buena alternativa a los métodos artificiales de depuración del agua, como los biológicos y químicos, que son más costosos e incluso riesgosos.
Si agregamos que estos sistemas se integran de excelente forma al entorno natural, encontramos que es una efectiva solución verde para una época en la que es más importante que nunca el cuidado del planeta y el impacto que tenemos en él.
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