El 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua, una fecha establecida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para reflexionar sobre la importancia de este recurso vital para la vida y el desarrollo humano.
El lema de este año es «Agua para la paz», que busca resaltar el papel del agua como factor de cooperación, armonía y resiliencia frente a los desafíos comunes.
¿Por qué el agua es importante para la paz?
El agua es esencial para la supervivencia y el funcionamiento de todos los seres vivos, así como para la producción de alimentos, energía, materias primas y otros bienes que contribuyen al desarrollo económico y social.
Además, el agua es un elemento clave para la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad, que proveen servicios ambientales como la regulación del clima, la purificación del aire y del agua, la polinización, el control de plagas y el ecoturismo.
Sin embargo, el agua se enfrenta a múltiples amenazas que comprometen su disponibilidad, calidad y equidad. Según la ONU, el 71% de la superficie terrestre está cubierta por agua, pero solo el 2,5% es agua dulce, y de esta, solo el 0,5% es accesible para el consumo humano.
Se estima que para 2025, el 63% de la población mundial vivirá en áreas con escasez de agua.
Por otro lado, el agua también sufre de contaminación por diversas fuentes, como los desechos domésticos, industriales y agrícolas, que afectan su calidad y su potabilidad.
Se calcula que el 80% de las aguas residuales se vierten al medio ambiente sin tratamiento, lo que provoca la degradación de los ecosistemas y la transmisión de enfermedades.
Finalmente, el agua también es objeto de desigualdad y exclusión social, ya que no todas las personas tienen acceso al agua potable y al saneamiento básico, que son derechos humanos reconocidos por la ONU.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2017, 785 millones de personas carecían de acceso a servicios de agua potable gestionados de forma segura, y 2000 millones de personas utilizaban fuentes de agua contaminadas con heces.
Estas cifras revelan las brechas existentes entre los países desarrollados y los países en desarrollo, así como entre las zonas urbanas y las zonas rurales, y entre los grupos sociales más vulnerables y los más privilegiados.
Estos problemas pueden generar conflictos entre los diferentes usuarios y usos del agua, tanto dentro como entre los países.
Según la ONU, más de 3000 millones de personas en todo el mundo dependen de agua que atraviesa las fronteras nacionales.
Solo 24 países tienen acuerdos de cooperación para todos los recursos hídricos que comparten. Además, el cambio climático puede agravar la situación, al provocar fenómenos extremos como sequías, inundaciones, tormentas y deslizamientos de tierra, que afectan la disponibilidad y la calidad del agua, así como la seguridad y la salud de las personas.
Ante este panorama, se hace necesario generar conciencia y responsabilidad sobre el uso y cuidado del agua, desde la infancia hasta la edad adulta, mediante la educación formal e informal, los medios de comunicación y las redes sociales.
Se hace imprescindible fomentar la cooperación y la participación en la gestión y la protección de los recursos hídricos, tanto a nivel local, nacional, regional e internacional, respetando los principios de equidad, solidaridad y sostenibilidad.
De esta manera, se puede contribuir a la prevención y la resolución de conflictos, así como a la construcción de la paz y el desarrollo.
¿Qué se hace para celebrar el Día Mundial del Agua 2024?
Con motivo del Día Mundial del Agua 2024, la ONU y la UNESCO han lanzado la campaña mundial «Agua para la paz», que invita a todos los actores sociales a unirse en torno al agua y a utilizarla en favor de la paz, sentando las bases para un futuro más estable y próspero.
La campaña ofrece diversos recursos para participar, como carteles, folletos, videos, infografías, mensajes clave y preguntas frecuentes, que se pueden descargar desde el sitio web oficial del Día Mundial del Agua.
Además, se realizan diversas actividades y eventos para conmemorar este día, como conferencias, seminarios, talleres, exposiciones, conciertos, concursos, marchas, campañas, entre otros, que buscan informar, sensibilizar y movilizar a la población sobre la importancia del agua para la paz.
Algunos ejemplos de estas actividades son:
- El evento oficial del Día Mundial del Agua 2024, organizado por la ONU y la UNESCO, que se llevará a cabo el 22 de marzo en la sede de la ONU en Nueva York, y que contará con la participación de representantes de gobiernos, organizaciones internacionales, sociedad civil, academia, sector privado y medios de comunicación, que debatirán sobre los desafíos y las oportunidades del agua para la paz.
- El Foro Mundial del Agua 2024, organizado por el Consejo Mundial del Agua y el Gobierno de Brasil, que se realizará del 18 al 23 de marzo en Brasilia, y que reunirá a más de 40.000 participantes de más de 170 países, que compartirán experiencias, conocimientos y soluciones sobre el agua para la paz.
- El Premio Rey Hassan II de Marruecos para el Agua 2024, que se otorgará el 22 de marzo en Rabat, y que reconocerá a las personas u organizaciones que hayan contribuido de forma sobresaliente a la cooperación y la solidaridad en el ámbito del agua, especialmente en las regiones afectadas por conflictos o situaciones de emergencia.
- El Festival Internacional de Cine del Agua 2024, organizado por la Fundación Agua para la Vida, que se celebrará del 15 al 24 de marzo en varias ciudades de España, y que proyectará más de 100 películas de diferentes géneros y formatos, que abordan el tema del agua para la paz desde diversas perspectivas y sensibilidades.
¿Qué podemos hacer para celebrar el Día Mundial del Agua 2024?
Además de participar en las actividades y eventos organizados por las instituciones y organizaciones, también podemos celebrar el Día Mundial del Agua 2024 desde nuestra propia esfera de acción e influencia, realizando acciones concretas que demuestren nuestro compromiso con el agua para la paz.
Estas son algunas sugerencias que podemos poner en práctica:
- Informarnos y educarnos sobre el tema del agua para la paz, consultando fuentes confiables y actualizadas, como las que ofrece la ONU y la UNESCO, y compartiendo esta información con nuestros familiares, amigos, colegas y redes sociales, usando el hashtag #AguaParaLaPaz.
- Sensibilizarnos y sensibilizar a los demás sobre la importancia del agua para la paz, reflexionando sobre cómo el agua afecta nuestra vida y la de los demás, reconociendo el valor del agua en sus diferentes dimensiones (cultural, ecológica, económica, social, etc.), y expresando nuestra solidaridad con las personas que sufren por la falta o el mal uso del agua.
- Movilizarnos y movilizar a los demás por el agua para la paz, participando en las actividades y eventos que se realizan en nuestra comunidad o ciudad, o organizando nuestras propias iniciativas, como charlas, debates, exposiciones, conciertos, concursos, marchas, campañas, etc., que promuevan el diálogo, la cooperación y la acción por el agua.
¿Qué acciones tomas tú en tu empresa o proyecto para el ahorro del agua?
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